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martes, 17 de abril de 2012

Leyendo:



Este libro es mucho más que el mejor testimonio de la muerte de Virginia Woolf. En parte, por estar escrito por la persona que compartió con ella su enfermedad y su infinita lucidez. Su tristeza, pero también su alegría.
Además, es el testimonio de una guerra: la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, diría que, sobre todo, habla de humanidad y de cómo la desesperación se vuelve un poco más pequeña cuando se intenta compartir.

6 comentarios:

  1. Me dejas con ganas de buscarlo para celebrar el día del libro.

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  2. Este libro fue para mí un hallazgo en los saldos de una librería, una edición antigua que guardo con mucho cariño. Por tu portada parece que lo han vuelto a editar, me he alegrado al verlo.

    Te cuenta muy bien todo lo que rodea el final de Virginia.

    Saludos.

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  3. No tenía ni idea que hubiera sido editado antes. Es la última parte de sus memorias, las otras aún no se han traducido.

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  4. Me tentó muchísimo la lectura.
    ¿Y sabés qué? creo que tengo la misma torre Eiffel en pequeño que vos :)

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  5. La compré en la "Boutique Officiel" de la Torre Eiffel.

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